Uno de los rasgos del rostro en los que antes se nota el paso del tiempo es sin duda en la mirada. La piel de los párpados pierde su natural firmeza y elasticidad con el paso de los años. Esto provoca líneas de expresión, arrugas y flacidez en los tejidos. La temida caída de las cejas intensifican esta sensación, restando amplitud al párpado superior y provocando que el rabillo del ojo se note direccionado hacia abajo, triste, cansado. Mediante la cirugía de elevación de cejas podemos revertir este proceso, devolviéndole a nuestra mirada una apariencia más juvenil y un aspecto descansado. ¿Cómo se consigue?
¿Soy candidato a una elevación de cejas?
Normalmente hacia los 40 años empiezan a aparecer los síntomas que llevan a optar por una elevación de cejas. También influye el estilo de vida y la carga genética. La cola (extremo lateral) de las cejas empieza a descender y la expresión de la mirada se entristece. Aunque estemos perfectamente descansados, permanece en nuestro rostro una apariencia somnolienta. Otras de las razones que nos convierten en un candidato ideal para elevación de cejas son:- Aparición de líneas horizontales en la frente.
- Profundos surcos entre ceja y ceja.
- Pesadez en los párpados superiores.
Elevación de cejas: ¿en qué consiste?
La elevación de cejas, también denominada frontoplastia o lifting de cejas, tiene varias posibilidades de abordaje dependiendo de las necesidades del paciente y sus características, así como del consejo profesional que preste el cirujano plástico. Las más habituales son:- Elevación supraciliar directa: mediante una incisión mínima en el borde superior de la ceja se extirpa una pequeña cantidad de piel para reposicionarla más arriba. La ventaja de realizar esta técnica es que es un procedimiento ambulatorio que puede realizarse con anestesia local y que tiene una tasa bajísima de riesgos y complicaciones.
- Lifting coronal: En este caso la incisión se practica en la zona del cuero cabelludo, permaneciendo las cicatrices ocultas bajo el cabello. Este abordaje permite una recolocación más profunda y precisa, actuando sobre las estructuras musculares que provocan la caída de las cejas, aunque supone una cirugía más compleja y con más riesgo de complicaciones que la anterior.
- Lifting temporal: No se refiere a que sus efectos no sean permanentes, sino a que las incisiones en este caso se realizan en el cuero cabelludo pero en la zona de las sienes. Se accede a las cejas por debajo del músculo de la frente, elevando la cola de las cejas mediante suturas internas.